Por duro que pueda sonar, quizá los ideales no estén hecho para verse cumplidos. Quizá su misión es, más bien, influir positivamente en nuestro hacer y discurrir cotidiano.
Si los cumplimos, podemos sentirnos completxs, realizadxs. Es a lo que yo aspiro siempre. A lo que aspiraré siempre.
Mientras, me dejo guiar por lo que considero el buen camino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario