A veces tengo la sensación de que pongo la música alta para no oír mis propios pensamientos.
No es práctica habitual ni común en mí. Es cosas de estos nuevos tiempos.
Supongo que no puedo pensar y pensar y pensar y pensar todo el día e intento ahogar los gritos de mi cerebro con música. Buena música.
La música siempre acompaña. Esa sí que no te traiciona. Ahí está cuando la necesitas. Para lo que necesites. A veces está, simplemente, para escucharte o para que no te escuches demasiado. Calma plácida. Otras, para hablarte. Otras es sólo la compañía que no molesta. En muchas ocasiones es la banda sonora de tu vida.
1 comentario:
La música es algo hermoso y la hay para todo momento.
Me gusta como escribes!
Saludos
pensamientosdegavroche.blogspot.com
Publicar un comentario